No voy a parar.

De amores entre dientes, de susurros al tiempo, de lejanías esclavizadas, de secretos al viento. Veo emerger una luna plateada y llena, veo la noche calurosa derretirse en el aire. Me pregunto qué será de mí, donde iré a parar. Solo encuentro una respuesta. No voy a parar. Que la noche pase, que la oscuridad se aleje, que vuelvan mañana y me encuentren en otro rumbo. Que caricias en cualquier cama no buscaré, que besos en ajenos labios no encontraré, que no voy a quedarme a escuchar palabras absurdas de ilusos ermitaños. No voy a parar a ver si por si acaso en este u otro lugar me encuentro, porque estoy seguro que me encontrare en el camino, porque estoy seguro que habrán besos para mí en los labios que son míos y que caricias sobran para un viajero incierto. No voy a detenerme a ve qué pasa. Voy a hacer que pase para poder detenerme. Voy a gritarle mis secretos al viento voy a susurrar mi vida al alba, voy a abandonar mis grilletes en la esclavitud única de mi libertad. Pero si algún día me detengo no te confundas. Puedo detenerme pero no voy a parar.

Pancho.