domingo, 26 de octubre de 2014

Proceso ineludible

La esperanza reflejada en rostros malgastados,
llenos de batallas.
tan faltos de brillo en la mirada,
tan atados a esquemas,
a mentes,
a supuestos.

Estar deambulando,
siguiendo el rastro que deja el aura,
siguiendo versos,
escuchándonos los gestos.
perdiendo todo,
incluso el yo.

Una habitación tan devastada,
pintada de color inerte,
vacía de conciencias,
dispersa y clandestina.
episodios alterados que confunden,
una realidad que no se va,
que se fragmenta con nosotros.
ese palpitar tan incesante;
no se mira igual,
no se piensa igual.

Estado infinito,
la tierra arroja las esencias,
el corazón recuerda palpitar,
la magia mueve todo,
el tiempo esta de mas.

desaparecer,
estar eternamente en la memoria,
en la frágil memoria.
las dimensiones nos revelan,
nos despegan de nosotros mismos,
nos transforman en estrellas,
nos dan el don de comprender.

Moriré,
así sin decir nada.


Marlon Mendieta