Amanece,
El amante ofrece serenatas a los dioses del amor,
Esperando ser escuchado,
Así sea por el viento.
Su amada despierta,
Reconoce los cantares que le ofrece el viento,
Los acepta con una vaga sonrisa.
El la mira desde lejos,
Nervioso alza el vuelo,
Se posa en una rama a vigilar el majestuoso aletear de su Julieta,
Sonríe pues el mundo deja de existir por un instante.
Ella busca alimento,
y aunque no lo demuestra busca ser amada,
que la acaricien con ternura,
querer y que la quieran.
El se llena de valor,
se acerca,
duda y se pregunta el por que de su sentir,
por que tiembla cuando la mira?
Por que sueña con ella?.
El universo confabula y les regala a los amantes un paisaje de terciopelo,
Llueve,
Ella busca abrigo y se cobija bajo las ramas secas,
Ramas de aquel árbol que seria testigo mudo del amor.
El se pierde en su silueta,
Se posa junto a ella,
Se cruzan las miradas,
Se regalan una nerviosa sonrisa.
El tiempo se detiene,
Aquellas secas ramas sirven de refugio,
Y la lluvia sale a bailar con la esperanza,
Ella emprende el vuelo,
El empieza la persecución,
Ella sonríe y el pierde el aliento.
Cae la noche y los amantes danzan cogidos del viento.
Luna llena,
Las estrellas tiritan de emoción.
El la sorprende,
La rodea y aquella extraña fuerza,
Aquel cosquilleo,
Y la magia de dos corazones que palpitan al unísonos
Desembocan en un beso,
El mundo entero se sonroja.
Y los cuerpos dejan de ser cuerpos,
Ahora son almas,
Son sueños y promesas.
Juntos volaran,
Talvez sin rumbo,
Solo volaran,
solo serán libres.
Marlon M.
gracias mi principe!! volveremos a sonreir se kruzaran las miradas y estaremos en ese arbol para ke el mundo sea testigo de nuestro amor!..
ResponderEliminar