Entiendo el mundo de colores,
usamos al viento para hablar y bailamos por encima de la luz.
Somos la única evidencia de los pasos,
de los rastros que se irán,
de los huesos,
de la cal.
Tierra y vínculo nos llaman,
en rojo aprendimos a sentir, a volver, a esperar.
Caminamos con retazos, nos miramos en retrasos,
nos perdemos en reflejos, nos iremos con los versos.
mañana, tal vez mañana nos silenciarán.
Agua escapa a tus esporas,
agua que vibra en azul,
agua llena de consejos,
que se aquieta con los besos,
que dejó mojado al mar.
En violeta entré en un trance,
y golpeé directo al sol,
me quedé en los espirales,
me esparcí desde tu voz.
me esparcí desde tu voz.
Susurré placeres a los muertos y bebí brindando con la luz,
desgasté un instante las distancias y me até sonriendo de esta cruz.
dejé este decadente cuerpo,
dejé gastada mi inquietud.
Ahora los colores me confunden,
me detienen los momentos mágicos,
me aferro a mis ideas, a nada.
ahora que no entiendo,
ahora que trasciendo,
ahora que me escapo y que enveneno,
ahora que me callo,
ahora que...
ahora.
Marlon Mendieta.